La convivencia en los centros de secundaria: un estudio de casos
Alejandro Campo, Alfonso Fernández, Jesús
Grisaleña *
SÍNTESIS: Una realidad inexcusable que deben afrontar
los centros educativos es la de que ciertos patrones de comportamiento,
válidos durante mucho tiempo, se han quedado actualmente
anticuados y deben cambiarse. En este sentido, ideas como disciplina
escolar, autoridad o convivencia en las aulas, son conceptos en
continua discusión y revisión.
Esta investigación, realizada en el isei-ivei (Instituto
Vasco de Evaluación e Investigación Educativa), presta
atención a cómo se construye la convivencia y a cómo,
una vez consolidada, se mantiene y se desarrolla en distintas situaciones.
Para ello se ha acudido a la experiencia de tres centros escolares,
que han dado respuesta de modo sistemático a los problemas
que se les planteaban en este aspecto.
La metodología de investigación es el estudio de
casos, que permite iluminar la situación de los centros,
describiendo sus itinerarios de ac-tuación.
Como denominador común de las conclusiones, se puede señalar
que cada centro escoge un conjunto de medidas, un cóctel
personalizado, derivado del diagnóstico que realiza de la
situación. Hay una actitud de base que lleva a los centros
a repensar la convivencia como elemento unificador y constructivo
en su trabajo con el alumnado, con las familias y con la comunidad
más próxima.
Las conclusiones básicas de este estudio se centran en la
identificación y en la descripción de las estrategias
utilizadas en la solución de los problemas de convivencia.
SÍNTESE: Uma realidade imprescindível que
devem afrontar os centros educacionais é a de que alguns
padrões de comportamento, válidos durante muito tempo,
ficaram antiquados e devem ser mudados. Neste sentido, idéias
como disciplina escolar, autoridade ou convivência nas salas
de aula, são conceitos em continua discussão e revisão.
Esta pesquisa, realizada no isei-ivei (Instituto Vasco de Avaliação
e Investigação Educacional), presta atenção
em como se construi a convivência e em como, uma vez consolidada,
se mantém e se desenvolve em diferentes situações.
Pasa isso se acudiu à experiência de três centros
escolares que responderam de maneira sistemática aos problemas
que se planejavam nesse aspecto.
A metodologia de investigação é o estudo de
casos, que permite esclarecer a situação dos centros,
descrevendo seus itenarários de funcionamento.
Como denominador comum das conclusões, se pode sinalizar
que cada centro escolhe um conjunto de medidas, um coquetel personalizado,
derivado do diagnóstico que realiza da situação.
Há uma atitude de base que leva aos centros a repensar a
convivência como elemento unificador e construtivo en seu
trabalho com o aluno, com as famílias e com a comu-nidade
mais próxima.
As conclusões básicas deste estudo se concentram
na identificação e na descrição das
estratégias utilizadas na solução dos problemas
de convivência.
1. PRESENTACIÓN
Una realidad ineludible que deben afrontar los centros educativos
hoy en día es la de que ciertos patrones de comportamiento,
que han sido válidos durante mucho tiempo, se han quedado
obsoletos y deben ser cambiados. En este sentido, ideas como disciplina
escolar, autoridad o convivencia en las aulas, son conceptos en
continua discusión y revisión.
Existe una tendencia generalizada y simplista que lleva a interpretar
el problema de la disciplina en términos de comportamiento,
vale decir, como una repetición no deseada e inaceptable
de conductas de determinados individuos o de ciertos grupos. Por
tal razón, a veces el debate educativo en torno a la convivencia
y a la disciplina se ha convertido en un debate sobre la indisciplina,
sobre la violencia escolar, sobre el deterioro de la convivencia,
y sobre las respuestas organizativas para limitar y para contrarrestar
los efectos del comportamiento antisocial y disruptivo en el seno
de la escuela.
En la investigación que aquí se presenta se quiere
prestar atención a cómo se construye la convivencia
y a cómo, una vez consolidada, se mantiene y se desarrolla
en distintas situaciones. Para ello hemos acudido a la experiencia
de tres centros escolares, que han dado respuesta de modo sistemático
a los problemas que se les planteaban en este aspecto. Representan
un pequeño pero significativo ejemplo de los centros escolares
que están trabajando en este ámbito dentro de la Comunidad
Vasca, amparados en las orientaciones y en los recursos del programa
«Educación para la convivencia» de la Dirección
de Innovación Educativa del Departamento de Educación
del gobierno de dicha Comunidad Autónoma.
2. MARCO TEÓRICO
Las conclusiones de varios estudios sociológicos (Elzo,
1996; Martín Serrano y Velarde Hermida, 1996) hacen ver que
los niveles de violencia y los de conductas antisociales en las
escuelas no son mayores que los de antaño.
Cada escuela tiene una consistencia propia y por derecho se convierte
en unidad de intervención, y, por consiguiente, en unidad
de análisis. El clima escolar, ya sea positivo o negativo,
no se explica sólo por el origen social de sus alumnos ni
por el emplazamiento geográfico en el que esté la
escuela. Escuelas, colegios e institutos comparables por su entorno
y por las condiciones estructurales, tienen climas muy diferentes.
La escuela únicamente tiene capacidad de intervención
en aquellas variables que controla, en los factores endógenos
de convivencia, como son el clima del centro, las normas de convivencia
y el tratamiento individualizado de personas y de problemas. Se
le escapan o dicha escuela tiene una influencia indirecta y limitada
en los factores exógenos que afectan a la convivencia escolar,
como son la familia, el barrio, el grupo de amigos, los medios de
comunicación (Fernández García, 1996).
2.1 El desarrollo personal y social como objetivo educativo
Existen tres perspectivas de análisis que permiten discernir
el grado en el que los centros educativos asumen el trabajo en convivencia:
El proceso de socialización y el desarrollo moral
Los alumnos y las alumnas, al estar en contacto permanente con
las agencias más importantes de socialización, son
portadores de unas representaciones, de unas valoraciones y de unos
sentimientos, que, en la interacción con la realidad social,
dan lugar a unas actitudes ante el estudio, el trabajo, la amistad,
la violencia... que se manifiestan en conductas o en comportamientos
(Ayestarán, 1994).
En la actividad pedagógica los centros utilizan dos caminos
básicos de actuación. Por una parte, los educadores,
como expertos morales, facilitan pautas culturales de valor y ayudan
en el uso de los procedimientos de la conciencia moral en el trabajo
de las tutorías y de otros programas transversales. Y, por
otra, plantean la organización de la escuela desde un punto
de vista formativo, como ámbito de participación activa
y de ejercitación democrática.
La implicación en la actividad escolar
Otra mirada útil de los centros es la que dirigen al currículo,
es decir, al diseño y al desarrollo de la actividad escolar.
El currículo es parte central en los propósitos escolares,
pero se contempla como el conjunto de experiencias vividas por el
alumno o por la alumna en el área de la escuela.
Del entendimiento que tiene del currículo la comunidad escolar,
derivan acuerdos tanto explícitos como implícitos
que guían las normas de convivencia. La asunción,
ampliamente documentada, de que las escuelas como instituciones
sociales tienen influencia importante en el comportamiento, en las
actitudes y en los resultados de los alumnos, se fundamenta en numerosos
estudios sobre la eficacia de la escuela.
El ejercicio del poder y la regulación de las conductas
Por último, también se intenta averiguar en qué
medida la escuela asume la tarea de educar para la democracia y
para el ejercicio responsable de la ciudadanía, que se canaliza
mediante el desarrollo de las capacidades y de las habilidades para
una convivencia social fundada en la solidaridad, en la participación
y en el respeto, entre otros valores. Esta función democratizadora
de la escuela cruza transversalmente, y compromete todos y cada
uno de los procesos escolares.
2.2 Clima y cultura escolar
La investigación acude a otro marco analítico para
abordar el estudio de la convivencia escolar. Nos referimos a dos
constructos teóricos derivados del examen sobre eficacia
y mejora de la escuela: el clima y la cultura escolar.
El clima escolar
El clima escolar es un factor de eficacia de primera importancia,
de modo que es muy difícil que podamos imaginar, con un clima
negativo, un buen centro con un buen rendimiento y con un buen nivel
de convivencia. Esta idea cobra aún más fuerza si
entendemos como eficaz un centro que consigue un desarrollo integral
de todos y cada uno de sus alumnos, mayor de lo que sería
esperable teniendo en cuenta su rendimiento previo y la situación
socioeconómica y cultural de las familias.
Cultura escolar
Por otra parte, la cultura escolar es una expresión que
intenta captar los aspectos informales de organizaciones sociales
como las escuelas. Fullan y Hargreaves (1992) la describen como
«las creencias y las expectativas que se manifiestan en el
modo de actuar de la institución escolar, con referencia
particular a cómo se relacionan las personas».
2.3 La dimensión de los procesos en los proyectos de
convivencia
La mejora de la convivencia de los centros estudiados se sustenta
en su capacidad interna de avance. Esta cultura se manifiesta, entre
otros, en varios aspectos que funcionan de modo interrelacionado,
tal y como se indica en la figura:
3. DISEÑO Y DESARROLLO DE LA INVESTIGACIÓN
3.1 Tipo de investigación
Teniendo en cuenta el grado de desarrollo conceptual que existe
sobre el clima de relaciones y de convivencia, se ha optado por
realizar un estudio de tipo descriptivo, cuya finalidad genérica
es «observar individuos, grupos, instituciones, métodos
y materiales con el fin de descubrir, comparar, contrastar, clasificar,
analizar e interpretar las entidades y los acontecimientos...»
(Cohen y Manion, 1990). Entre la variedad de metodologías
existentes, se elige el estudio de casos.
Dicho estudio se plantea en términos fundamentalmente cualitativos,
aunque con elementos cuantitativos de contraste. El hecho de combinar
técnicas cualitativas y cuantitativas es frecuente en la
literatura de investigación, tanto en el proceso de recogida
de datos como en el análisis de los mismos (X. Coller, 2000).
3.2 Selección de la muestra
Después de definir los criterios, se eligieron tres centros
que trabajaban de forma positiva los problemas de convivencia, y
que contaban con suficiente experiencia en este campo. La selección
de la muestra, y después la de los informantes de cada centro,
se realizó intentando conseguir la máxima información
sobre los proyectos.
3.3 Metodología
Se efectuaron entrevistas en profundidad, individuales y en grupo,
a coordinadores del proyecto de convivencia, a equipos directivos,
al profesorado, al alumnado y a las familias. Se entregó
una encuesta a cuatro grupos de alumnos de cada centro. También
se hizo un análisis documental. Todo ello se complementó
con las observaciones directas del equipo de investigación.
3.4 Objetivos e hipótesis de la investigación
|
|
"Identificar y describir estrategias utilizadas por
centros de Secundaria en su intento de mejorar la convivencia".
"Describir y valorar el conjunto de medidas que cada
centro educativo utiliza en relación con los problemas
que se abordan y con el contexto de actuación".
"Clasificar los factores del clima escolar en relación
con su incidencia en la convivencia en los centros (factores
básicos/secundarios) y en relación con su viabilidad
(sencillos/complejos en la puesta en práctica)".
Las variables de tipo interno (el ambiente tranquilo y ordenado,
el liderazgo, el trabajo coordinado del equipo docente, etc.)
son determinantes en la construcción de un clima ordenado
de convivencia. Las circunstancias de tipo externo (condición
social del alumnado, entorno del centro, etc.) facilitan o
dificultan la tarea, pero no la determinan.
|
Las variables de tipo interno (el ambiente tranquilo y ordenado,
el liderazgo, el trabajo coordinado del equipo docente, etc.)
son determinantes en la construcción de un clima ordenado
de convivencia. Las circunstancias de tipo externo (condición
social del alumnado, entorno del centro, etc.) facilitan o
dificultan la tarea, pero no la determinan.
Existen estrategias comunes a todos los centros de Secundaria
que trabajan en la mejora del clima de relaciones y de convivencia,
y cuyo estudio permite obtener conclusiones sobre su eficacia
|
3.5 La fiabilidad y la validez de la investigación
Se cuidaron de manera especial todos los aspectos relacionados
con la validez y con la fiabilidad de la investigación, como
requisitos necesarios para la obtención de conclusiones fundamentadas.
La fiabilidad se aseguró mediante el establecimiento de pistas
de revisión y la posibilidad de la réplica paso a
paso; la validez interna, a través de la trian-gulación,
del comentario entre investigadores, de las comprobaciones con los
informantes, y de la recogida de materiales de contraste, fundamentalmente.
A su vez, la validez externa se llevó a cabo por medio del
muestreo relevante ya expuesto, de las descripciones en profundidad,
y de una amplia recogida de información.
3.6 Elaboración de los instrumentos de la investigación
El marco teórico propone un listado de componentes de la
convivencia, y los factores que abordará la investigación:
Listado de componentes de la convivencia
|
Centro educativo / aula
|
Colaboración del centro con...
|
1. Regulación de las conductas.
2. Integración de todas las personas, y compromiso
en una tarea compartida.
3. Relaciones.
4. Eficacia en los procesos de enseñanza/aprendizaje.
5. Dirección del centro y del proyecto de convivencia.*
|
1. Sistema escolar.
2. Comunidad próxima.
3. Sistema social más amplio.
|
* No se analizó en el nivel del aula.
Factores de la investigación
|
Factores de contexto
|
Factores temporales
|
Resultados
|
1. Historia y entorno del centro.
2. Historia y entorno del proyecto de convivencia.
3. Historia y entorno del trabajo en las aulas.
|
1. Estrategias del centro para abordar la convivencia en
los momentos iniciales.
2. Estrategias del centro para abordar la convivencia cuando
|
1. Logros del trabajo
en convivencia.
2. Sistemas
de evaluación.
3. Perspectivas de futuro
|
Este listado de factores del clima de relaciones y de convivencia
se realiza a través de las aportaciones que procedan de investigaciones
sobre el tema, del estudio de múltiples proyectos de convivencia,
y de la experiencia previa de los investigadores.
Cada uno de estos factores lleva asociados varios indicadores que
permiten introducir una medida cuantitativa del nivel que alcanzan.
Se realiza un gran esfuerzo para que dichos indicadores midan y
detecten, con precisión y sin ambigüedad, los elementos
y los componentes citados («operativizar» las variables)
(X. Coller, 2000).
Tomando como referencia el listado de factores, se elaboran los
instrumentos para las entrevistas y para el cuestionario.
3.7 Tratamiento de los datos
Los datos obtenidos por medio de las entrevistas, de los cuestionarios
al alumnado y del análisis documental, se analizan por separado.
Se concretan algunas cuestiones, que, debido a su importancia,
sirven para orientar todo el tratamiento de la información
y la obtención de conclusiones, tanto de cada centro como
los globales:
Revisión
por parte de los participantes en las entrevistas de la información
allí recogida:
El significado que se da a los elementos y a los componentes
de la convivencia de los centros pretende ser, desde el comienzo
del estudio, compartido con los actores del mismo. Por ello, el
equipo de investigación concede gran importancia a que
cada participante en la entrevista se reconozca en las opiniones
y en las valoraciones que los investigadores le adjudican en los
primeros informes enviados a los centros. Este significado es
también construcción compartida entre los investigadores.
La forma
de alcanzar los significados de los casos:
Se ha procurado descubrir estos significados encontrando el
sentido global de cada caso; para lograrlo se utilizan dos estrategias:
la interpretación directa de los ejemplos individuales,
y la suma de ejemplos hasta que se pueda decir algo sobre ellos
como conjunto o como clase. Casi siempre los significados importantes
surgen de las situaciones que se repiten con frecuencia, y que
se consideran significativas para la comprensión del caso.
3.8 Obtención de las conclusiones de la investigación
Como denominador común de las conclusiones, podemos señalar
que cada centro escoge un conjunto de medidas, un cóctel
personalizado, derivado del diagnóstico que realiza de su
situación. Existe una actitud de base que lleva a los centros
a repensar la convivencia como elemento unificador y constructivo
en su trabajo con el alumnado, con las familias y con la comunidad
más próxima.
La identificación de las estrategias utilizadas por los
centros constituye una de las conclusiones básicas de este
estudio. Se agrupan y se ordenan siguiendo un modelo que las organiza
según el grado de utilización en los tres, en dos
o en uno solo de los centros. Aquellas que aparecen en los tres
centros se clasifican, a su vez, de acuerdo con estos dos criterios:
- Grado de credibilidad o de fiabilidad, que es la medida en la
que la información obtenida está contrastada.
- Grado de valoración, que es la media de los valores que
los entrevistados y los encuestados conceden a la estrategia.
Se realiza un estudio pormenorizado de cada una de las estrategias
que aparece en los tres centros. Las estrategias de cada apartado
se ordenan de mayor a menor valor en el conjunto de la cre-dibilidad
y de la valoración. Al mismo tiempo, se determinan la credibilidad
y la valoración de cada apartado general del listado de componentes
de la convivencia ya descritos.
Con posterioridad se efectúa una interpretación
global de las estrategias, que permite situar las unas en relación
con las otras y en el contexto global de la investigación.
También se señala una serie de estrategias, que, desde
la perspectiva de los investigadores, debe ser reforzada. Así
mismo, se indican aquellas otras que, estando en el diseño
de la investigación, no han sido tenidas en cuenta por los
centros1 . Las conclusiones incluyen descripciones
sobre las características y sobre el entorno de los centros,
las situaciones previas que permiten situar el trabajo en convivencia,
y las estrategias utilizadas en los momentos iniciales.
Entre las conclusiones más importantes destaca la clasificación
de las estrategias en dos niveles: aquellas que obtienen mayor credibilidad
y valoración en el conjunto de los tres centros (primarias),
y aquellas otras que se encuentran en un segundo plano (secundarias):
Estrategias primarias
- Potenciación de las relaciones positivas de consideración
y de respeto.
- Implicación de la dirección del centro y de los
coordinadores de los proyectos.
Estrategias secundarias
- Establecimiento de un clima de orden, de seguridad y de trabajo
eficaz.
- Estimulación de la participación activa y de la
implicación de las personas.
- Planteamiento de actividades específicas para las tutorías
con el alumnado.
4. CONCLUSIONES
La técnica del estudio de casos no tiene como objetivo establecer
generalizaciones, sino desmenuzar situaciones y analizar particularidades;
en definitiva, poner la lupa en cuestiones concretas. Algunas evidencias
pueden extrapolarse y llevarse a otras localizaciones similares.
Desde este punto de vista, se describen los casos de los tres centros
investigados.
Por razones de espacio, en el presente resumen de la investigación
sólo se describirán con brevedad los siguientes apartados
de las conclusiones:
4.1 Características y entorno escolar de los centros
analizados
Existen varias diferencias entre los centros objeto de la investigación,
que se manifiestan en la disparidad de ratios alumnado/profesorado,
en la oferta de escolarización, en la estabilidad del profesorado,
en la composición social del alumnado, y en los entornos
físicos y culturales de los centros.
4.2 Descripción de las situaciones previas
En los tres centros el determinante de la actuación es la
percepción de un problema de mayor o de menor gravedad. Los
tres se convencen de que es más útil intentar dar
respuesta al problema que vivir con él.
Los profesores y profesoras que imparten docencia en la Educación
Secundaria Obligatoria (eso) y que provenían de los bachilleratos,
no estaban acostumbrados a trabajar con el tipo de alumnado que
accede a los nuevos niveles educativos, y, en algunos casos, esta
situación se percibe como el origen de los problemas. El
profesorado también señala una serie de cambios en
las situaciones familiares de los alumnos y alumnas. Igualmente,
se describe un cambio social general que hace más difícil
y ardua la tarea de enseñar.
Se percibe y se asume que desde los centros es necesario responder
a los aspectos de desarrollo personal y social, junto a los académicos
y cognitivos, aunque esto provoque algunas resistencias entre sectores
del profesorado.
Los tres centros coinciden en resaltar la colaboración
sistemática recibida por el/la asesor/a correspondiente del
Berritzegune2.
4.3 Conclusiones sobre el cuestionario del alumnado
La investigación valora las percepciones
de los alumnos a través de entrevistas grupales, y a través
de cuestionarios individuales a los alumnos de 2.º y de 3.º
de la eso3 . En la siguiente parrilla se reflejan
los cursos y los alumnos de cada centro a los que se les suministró
el cuestionario:
|
2.º ESO
|
3.º ESO
|
Centro A
|
34
|
36
|
Centro B
|
59
|
57
|
Centro C
|
35
|
41
|
El cuestionario utilizado consta de 70 preguntas, de las cuales
tres son de confirmación, cuyas únicas alternativas
de respuesta son sí/no. Dos ítems son de respuesta
múltiple, y pretenden conocer en qué lugares y en
qué momentos se daban determinadas conductas. Los 65 ítems
restantes son preguntas de percepción personal, que contestan
en una escala valorativa (nunca, casi nunca, suficientemente, casi
siempre y siempre) a la pregunta planteada. En ellas se indaga sobre
temas claves de la convivencia.
Con el fin de obtener una visión global del conjunto de
los resultados, se procedió a un agrupamiento de los diferentes
ítems del cuestionario. En algunos casos, y teniendo en cuenta
la especificidad de lo que se preguntaba, se optó por no
agrupar algunos ítems, y por analizarlos de manera individual.
Las conclusiones más importantes a las que se llegó
fueron las siguientes:
Valor medio de
los ítems:
La mayoría de los ítems supera con claridad
el valor medio de la escala, por lo que cuando algún ítem
queda por debajo o no lo supera con amplitud, se considera como
atípico y digno de especial atención.
Valores extremos
de dos conjuntos de ítems:
Dos conjuntos de ítems sorprenden por sus valores
extremos. Por un lado, el que alude a la participación del
alumnado en la gestión del aula destaca por su bajo valor,
lo que indica que éste no se siente suficientemente implicado
en tales tareas.
Es también llamativa la percepción que los alumnos
y alumnas tienen con respecto a las relaciones entre el profesorado
de sus centros. En los tres casos, sin excepción, los alumnos
y alumnas opinan que sus profesores mantienen entre ellos unas excelentes
relaciones, mucho mejores que las suyas.
¿Qué
opina el alumnado sobre la labor que el profesorado desarrolla?
¿Y sobre su propio rendimiento?:
El alumnado de los tres centros tiene muy buena opinión
sobre la labor que sus profesores y profesoras realizan en el aula.
En efecto, todos aquellos ítems que se refieren a las tareas
que realiza el profesorado, obtienen una alta puntuación
(coherencia y consistencia de las actuaciones, opinión sobre
su actitud ante ellos, seguimiento y preocupación por sus
estudios). Sin embargo, cuando los alumnos y alumnas opinan sobre
su propio rendimiento y sobre las propias expectativas, las puntuaciones
bajan de manera evidente.
Normas de centro
y de aula:
Obtienen alta puntuación aquellos apartados
que se refieren a la claridad, a la conveniencia y a la justicia
de las normas tanto de centro como de aula, lo que indica el trabajo
que los tres centros han realizado para que estas cuestiones sean
entendidas como es debido por el alumnado.
Valoraciones del
alumnado de 2.º y de 3.º curso:
A través de varios de los análisis realizados,
se constata la existencia de una manifiesta regularidad en las valoraciones
de los alumnos y alumnas de los cursos 2.º y 3.º de la
eso.
Si se examinan estas diferencias con un nivel de confianza del 95%,
se observa que en los tres centros investigados el alumnado de 2.º
curso valora mucho más que el de 3.º los siguientes
conjuntos de ítems:
1. Implicación del alumnado en la gestión del aula.
2. Coherencia y consistencia en las actuaciones del profesorado.
3. El alumnado recibe cursos de formación en convivencia.
4. Opinión del alumnado sobre la estimulación y sobre
la preocupación del profesorado hacia sus estudios.
¿Cómo
influye la variable sexo?:
No existen diferencias significativas en los resultados
de las valoraciones de los chicos y de las chicas en cuanto a los
conjuntos de ítems de la encuesta.
¿Se produce
el abuso entre iguales?:
Otro posible análisis se centra en las últimas
preguntas del cuestionario, que pretenden poner de manifiesto comportamientos
de abuso entre los propios alumnos y alumnas. Cuando se pregunta
quién y cuándo interviene en los abusos entre compañeros/as,
las respuestas indican que los profesores y los otros alumnos y
alumnas intervienen entre «suficientemente» y «casi
siempre».
Estos comportamientos se dan sobre todo en el patio del centro,
en menor medida en la clase, y también en otros lugares no
especificados. Los momentos en los que con más frecuencia
aparecen son en los recreos y en los descansos entre clases.
Ítems mejor
valorados:
Para finalizar el análisis, y tomando como referencia en
cada centro los cinco ítems con mayor puntuación,
se observan las siguientes tendencias, algunas de las cuales ya
han sido señaladas:
Amistad entre compañeros: para los tres
centros es el que obtiene mayor valoración.
Relación entre profesores: el ítem que
valora las relaciones entre los profesores obtiene en los tres centros
un valor muy elevado.
Conocimiento de la normativa de aula: el ítem
que pregunta sobre el conocimiento que tiene el alumnado de las
consecuencias de incumplir la normativa de aula, se encuentra también
entre los de mayor valoración.
Trato igualitario del centro/ayuda que ofrecen los profesores:
para los ítems que valoran los anteriores aspectos, las respuestas
de dos de los tres centros se encuentran entre las cinco más
valoradas.
Ítems peor
valorados:
Si este análisis se realiza sobre los cinco ítems
peor valorados, la clasificación queda de la siguiente manera:
Atractivo de las clases y estímulo hacia el aprendizaje:
los resultados de los tres centros coinciden en la más o
menos baja valoración sobre el grado en el que los profesores
hacen sus clases atractivas. Relacionado con esto, el ítem
que interroga sobre el estímulo que obtienen los alumnos
y alumnas por el aprendizaje consigue en dos centros valores por
debajo del tres.
Participación en la elaboración de la normativa
de centro: también en dos centros obtiene valoraciones
ligeramente superiores al tres la pregunta sobre la participación
de los delegados y delegadas en la elaboración de la normativa
de centro, mientras que para el tercer centro se queda por debajo
de esa cifra.
Normativa de aula: los ítems relacionados con
esos valores son bastante inferiores a otros.
4.4 Elementos y componentes del proyecto de convivencia en los
momentos iniciales
Se potencian las
relaciones positivas de consideración y de respeto:
Todos los centros comienzan a realizar actividades específicas
de convivencia que giran en torno a dos ejes fundamentales: procesos
de formación internos o externos del profesorado, y coordinaciones
para abordar los problemas que surgen en la relación con
el alumnado.
La dirección
presta apoyo y orientación al proyecto, y reparte responsabilidades
y recursos:
Todas las iniciativas se desarrollan con el decidido impulso
del equipo directivo y de la coordinadora del Proyecto. Sería
imposible imaginar el desarrollo de los proyectos de convivencia
de los tres centros sin este apoyo y sin esta decidida implicación.
Se establece un
clima de orden, de seguridad y de trabajo eficaz:
Desarrollo o ajuste de la normativa básica para el
alumnado, que se realiza a partir de algunos principios explícitos.
Procesos que conducen a la coherencia y a la consistencia en las
actuaciones del profesorado.
Se estimula la
participación activa y la implicación de las personas:
Se interviene para que todos los estamentos sobre todo
el profesorado se impliquen y participen en la gestión
del centro y en el Proyecto de Convivencia. Se organizan y se sistematizan
estas actuaciones.
Se plantean actividades
específicas para las tutorías con el alumnado:
Se preparan actividades específicas para tutorías
con el alumnado. Dichas actividades se desarrollan en diferentes
ámbitos y con distintas intensidades en cada centro, e implican
a los tutores, aunque no sólo a ellos.
4.5 Elementos y componentes del proyecto de convivencia en su
desarrollo
Relaciones positivas
de consideración y de respeto:
En los tres centros se destaca la importancia fundamental
de las relaciones entre los miembros del profesorado, aunque no
puede olvidarse el resto de relaciones del centro. De hecho, la
estrategia más valorada en los tres es la que indica que
las relaciones generales del centro son positivas, y que se trabaja
para su mejora.
Quizás puedan entenderse las estrategias de este apartado
de forma conjunta, si se piensa que existe un gran acuerdo en las
comunidades educativas de los tres centros sobre la importancia
de las relaciones y sobre su desarrollo, siendo para ello un factor
de primer orden la labor que desempeña el profesorado.
Tiene sentido que tales estrategias guarden una íntima vinculación
con la calidad de las relaciones internas del profesorado, y con
la coherencia y consistencia con las que éste se presenta
ante el alumnado. De hecho, otra estrategia complementaria insiste
en la forma de trabajo en convivencia como producto de las reflexiones,
de las aportaciones y de las conclusiones desarrolladas colectivamente
por el profesorado.
Esta elaboración mancomunada, esta construcción colectiva
de la convivencia, es un aspecto que en dos de los centros investigados
resulta esencial para el desarrollo del proyecto.
Las últimas estrategias del apartado que nos ocupa informan
sobre el tipo de trabajo que el profesorado desarrolla en convivencia
con respecto al alumnado. Tal labor se fundamenta en actitudes preventivas
frente a las reactivas, y en la atención a los problemas
que surgen con el alumnado. La ordenación de dichas actitudes
da a entender que las primeras se constituyen en condición
para que aparezcan las segundas.
Existe implicación
y estímulo de la dirección:
En los tres centros el papel que juega la dirección
en el Proyecto de Convivencia es considerado como muy importante.
Pero los papeles de animar, de asesorar y de formar recaen sobre
las coordinadoras de los proyectos. Utilizando mecanismos de liderazgo
compartido, gran parte del desarrollo y de la continuidad de los
proyectos cae bajo su responsabilidad. Es unánime la opinión
de los investigadores al señalar la importancia de la implicación
y del estímulo de la dirección del centro para el
desarrollo de los procesos de innovación y de cambio en los
centros educativos.
Establecimiento
de un clima de orden, de seguridad y de trabajo eficaz:
Parece que los centros valoran la importancia del establecimiento
de un marco normativo claro y que determine los límites de
lo permitido, a la vez que ponen en marcha procedimientos para que
el alumnado conozca dicha normativa. Podría pensarse que
esta claridad del marco normativo está asociada de alguna
forma al sosiego con el que transcurran las actividades del centro,
y al hecho de que este clima general haya mejorado con el tiempo.
También tiene relación con la coherencia y con la
consistencia en la actuación del profesorado.
Traspasado un cierto límite, la autoridad se ejerce para
dirimir los conflictos y las tensiones, y desempeña el poder
que el régimen disciplinario le otorga.
La normativa no se concibe como algo estático, sino como
un conjunto de medidas modulables que permiten mantener ese ambiente
general de calma y de sosiego.
Quizás por tal razón, el profesorado de los tres centros
revisa de forma periódica la normativa que se aplica, que
no pretende producir una sobrerregulación de estas situaciones
de convivencia escolar. En el caso que contemplamos, se trabaja
para que la norma se sitúe en un punto intermedio en el que
exista la suficiente regulación, pero no superior a la necesaria
libertad de opción por parte del alumnado. Este equilibrio
no es entendido como algo estático, sino como algo inacabado
y en permanente revisión.
Participación
activa e implicación de las personas:
Globalmente, los centros conceden gran importancia a la realización
de sus actividades habituales sin separar a los alumnos por niveles
de contenido, por capacidad o por otros criterios similares.
La implicación y la participación del profesorado
reciben una mayor valoración y están mejor documentadas
por parte de los centros que las relativas al alumnado y a las familias.
Esto no resulta sorprendente si se considera al profesorado como
el motor de la institución escolar, y, en consecuencia, su
implicación y su participación son condiciones necesarias
para el buen funcionamiento del centro y del proyecto de convivencia.
Parece que en tal terreno los centros consideran que ésta
es una labor de primer orden, y, muy posiblemente, necesaria para
que pueda desarrollarse dicho tipo de estrategias con las familias
y con el alumnado.
También se puede entender que la implicación y la
participación del profesorado están relacionadas con
su coordinación interna, y con el tipo de trabajo que éste
desarrolla en convivencia.
La utilización de los órganos de gobierno para impulsar
la participación, la implicación y el compromiso,
así como la importancia concedida a la toma de decisiones
mediante el acuerdo y el consenso, se sitúan como recursos
de gran importancia para el desarrollo de la convivencia de los
centros estudiados.
En los tres centros investigados existe la percepción de
que es difícil la participación y la implicación
del alumnado.
La importancia
del trabajo de tutoría en el desarrollo personal y social
del alumnado:
Las estrategias utilizadas en el centro constituyen la base
sobre la que descansan los proyectos de convivencia, debido a su
abordaje colectivo por parte del profesorado. Sin embargo, no hay
que olvidar que sería muy difícil concebir los proyectos
sin el trabajo que se desarrolla en las aulas, ya que en este nivel
se consolida la mayor parte de las actitudes, de los comportamientos
y de los modos de proceder de alumnos y de profesores. En definitiva,
es el lugar en el que, día a día, se pone a prueba
el proyecto de convivencia.
El trabajo de las tutorías tiene una gran consideración.
De modos diferentes y con distintas intensidades, todos los centros
valoran la labor de tutoría con el alumnado, y realizan actividades
específicas sobre convivencia en este ámbito. Se abordan
temas relativos a la integración, como el conocimiento mutuo
en el grupo de clase y la elección de representantes, así
como materias de formación que desarrollan conocimientos
y destrezas tales como la asertividad y las habilidades sociales,
la intermediación en los conflictos, la clarificación
de va-lores personales.
Desde el punto de vista de la lógica investigativa, no es
posible determinar la relación causa-efecto entre las estrategias
de centro y las de aula, aunque parece evidente que existen una
relación y una implicación mutuas, por lo que habría
que considerar que las estrategias de aula se llevan a efecto bajo
el paraguas protector de las de centro.
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Notas:
0 Instituto Vasco de Evaluación
e Investigación Educativa (ISEI-IVEI), España.
1 Al final de este resumen se
presenta un cuadro sumario de todas las estrategias utilizadas.
2 Con esta denominación,
en el País Vasco (Euskadi) se hace referencia a los centros
para la coordinación y para el asesoramiento del profesorado.
3 La Educación Secundaria
Obligatoria escolariza a todos los alumnos entre 12 y 16 años
en cuatro cursos diferenciados.
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